Ecos Diarios - hace 25 años
27 de noviembre 1988 - Para los necochenses que residen en el populoso sector de la zona portuaria —y más concretamente para su grey católica — la de hoy, domingo 27 de noviembre habrá de ser, sin duda, una fecha trascendental; un día especialmente significativo, por cuanto a partir de él podrán satisfacer las necesidades espirituales en su parroquia propia. Porque lo que hasta ahora funcionaba corno Capellanía Vicaria Nuestra Señora de la Medalla Milagrosa , de hoy en más ha de ser Parroquia de Nuestra Señora de la Medalla Milagrosa.
Vale decir, siempre con el patronazgo de la Ssma. Madre de Dios, bajo la misma advocación que inspiró la Virgen María a Santa Catalina de Labouré, en el curso de sucesivas apariciones.
Consecuentemente con ello, con el grato acontecimiento que vivirán hoy esos necochenses, presididos por el obispo titular de la Diócesis de Mar del Plata, Mons. Dr. Rómulo García, se impone ofrecer aquí una breve reseña histórica al respecto. - -
Toda obra de la Iglesia tiene comienzos pequeños, y en base a testimonios vivos y algunas referencias escritas, cabe evocar cómo se plantó y fue creciendo la semllta de la nueva comunidad cristiana del barrio del puerto. - Era obispo de la Diócesis marplatense Mons. Dr. Enrique Rau, cuando solicitó al Pbro. Andrés Etchezahar. párroco de Nuestra Señora de Lourdes, de la villa balnearia, que fuera pensando y viendo las posibilidades de constituir un centro de culto en dicha barriada, por lo cual, con esa visión pastoral, se abocó el Padre Andrés a tal gestión. Comenzó con la misa y la catequesis de comunión, en un galpón cedido al efecto por la familia Durañona. Y luego, en lo que es actualmente fábrica de bolsitas de polietileno. Allá por 1959, la señora María E.D. de Salaberri y su esposo, D. Jorge Domingo, donaron tres lotes de terreno, donde en calle 61 N° 846 se erigió una modesta capillita, hasta que el 15 de diciembre de 1960 se concluyó con la instalación del galpón que funcionaría como centro del culto católico. Esto se llevó a cabo merced al esfuerzo económico de todo el barrio, lográndose recaudar la suma de 223.990 pesos moneda nacional.
Casi tres lustros después, el 15 de octubre de 1976, el Padre Andrés presentaba a la comunidad al nuevo sacerdote que iba a tomar a su cargo la dirección espiritual de esa grey católica: el Pbro. Jesús José Domaica, sacerdote nativo de Necochea, nacido en el seno de una laboriosa y honesta familia de ascendencia vascongada, y cuya ordenación tuviera lugar el 22 de julio de 1960, en la parroquia Santa María del Carmen, de nuestra ciudad.
Digamos finalmente que es de confiar en que los argentinos podamos superar pronto las dificultades económicas que afronta nuestra Patria, y que los necochenses podamos ver concluido el edificio de la ahora flamante parroquia. Parroquia quiere decir barrio, lugar concreto que se utiliza para alabar a Dios, y que simboliza la comunión de vida de la comunidad presente, centrada en las tres virtudes teologales: Fe, Esperanza y Caridad.
Los actos programados - El programa respectivo se iniciará a las 10 horas, con una procesión solemne que portando en andas la venerada imagen de la Virgen de la Medalla Milagrosa, recorrerá diversas arterias próximas al templo, sito como se sabe en calle 61 N 846. La columna de fieles marchará por calle 61 hasta 18, por ésta hasta 71, y de 71 se desplazará hasta la calle 22, para regresar a la capilla. Durante el recorrido, los fieles rezarán el Santo Rosario y entonarán, cánticos marianos. Se prevé que la columna retornará al punto de partida para as 11.30 horas.
Vale decir, siempre con el patronazgo de la Ssma. Madre de Dios, bajo la misma advocación que inspiró la Virgen María a Santa Catalina de Labouré, en el curso de sucesivas apariciones.
Consecuentemente con ello, con el grato acontecimiento que vivirán hoy esos necochenses, presididos por el obispo titular de la Diócesis de Mar del Plata, Mons. Dr. Rómulo García, se impone ofrecer aquí una breve reseña histórica al respecto. - -
Toda obra de la Iglesia tiene comienzos pequeños, y en base a testimonios vivos y algunas referencias escritas, cabe evocar cómo se plantó y fue creciendo la semllta de la nueva comunidad cristiana del barrio del puerto. - Era obispo de la Diócesis marplatense Mons. Dr. Enrique Rau, cuando solicitó al Pbro. Andrés Etchezahar. párroco de Nuestra Señora de Lourdes, de la villa balnearia, que fuera pensando y viendo las posibilidades de constituir un centro de culto en dicha barriada, por lo cual, con esa visión pastoral, se abocó el Padre Andrés a tal gestión. Comenzó con la misa y la catequesis de comunión, en un galpón cedido al efecto por la familia Durañona. Y luego, en lo que es actualmente fábrica de bolsitas de polietileno. Allá por 1959, la señora María E.D. de Salaberri y su esposo, D. Jorge Domingo, donaron tres lotes de terreno, donde en calle 61 N° 846 se erigió una modesta capillita, hasta que el 15 de diciembre de 1960 se concluyó con la instalación del galpón que funcionaría como centro del culto católico. Esto se llevó a cabo merced al esfuerzo económico de todo el barrio, lográndose recaudar la suma de 223.990 pesos moneda nacional.
Casi tres lustros después, el 15 de octubre de 1976, el Padre Andrés presentaba a la comunidad al nuevo sacerdote que iba a tomar a su cargo la dirección espiritual de esa grey católica: el Pbro. Jesús José Domaica, sacerdote nativo de Necochea, nacido en el seno de una laboriosa y honesta familia de ascendencia vascongada, y cuya ordenación tuviera lugar el 22 de julio de 1960, en la parroquia Santa María del Carmen, de nuestra ciudad.
Digamos finalmente que es de confiar en que los argentinos podamos superar pronto las dificultades económicas que afronta nuestra Patria, y que los necochenses podamos ver concluido el edificio de la ahora flamante parroquia. Parroquia quiere decir barrio, lugar concreto que se utiliza para alabar a Dios, y que simboliza la comunión de vida de la comunidad presente, centrada en las tres virtudes teologales: Fe, Esperanza y Caridad.
Los actos programados - El programa respectivo se iniciará a las 10 horas, con una procesión solemne que portando en andas la venerada imagen de la Virgen de la Medalla Milagrosa, recorrerá diversas arterias próximas al templo, sito como se sabe en calle 61 N 846. La columna de fieles marchará por calle 61 hasta 18, por ésta hasta 71, y de 71 se desplazará hasta la calle 22, para regresar a la capilla. Durante el recorrido, los fieles rezarán el Santo Rosario y entonarán, cánticos marianos. Se prevé que la columna retornará al punto de partida para as 11.30 horas.
De inmediato s
e oficiará la Santa Misa presidida por Mons. Rómulo García y concelebrada por el Pbro.Domaica, y otros sacerdotes que prestan su sagado ministerio en templos locales y de la zona. Durante la misa se administrará el Sacramento de la Confirmación, además de renovar sus promesas los ministros de Eucaristía asignado
s a la Medalla Milagrosa, reafirmarán la promesa matrimonial los cónyuges asistentes y serán bendecidas parejas de novios próximas a contraer enlace matrimonial. Además, durante el ofertorio de la misa se realizarán ofrendas de ropas, calzados, juguetes, flores, libros y remedios. - EL ALMUERZO - Como digno colofón a lo expuesto, para las 13 horas del domingo está previsto servir un almuerzo de confraternidad mariana, en el salón Gozo y Esperanza sito cerca de la flamante parroquia. El cordial ágape consistente en asado a la criolla, es organizado por la Peña Los Peregrinos y obtendrá muy lucido y animado desarrollo.
e oficiará la Santa Misa presidida por Mons. Rómulo García y concelebrada por el Pbro.Domaica, y otros sacerdotes que prestan su sagado ministerio en templos locales y de la zona. Durante la misa se administrará el Sacramento de la Confirmación, además de renovar sus promesas los ministros de Eucaristía asignados a la Medalla Milagrosa, reafirmarán la promesa matrimonial los cónyuges asistentes y serán bendecidas parejas de novios próximas a contraer enlace matrimonial. Además, durante el ofertorio de la misa se realizarán ofrendas de ropas, calzados, juguetes, flores, libros y remedios. - EL ALMUERZO - Como digno colofón a lo expuesto, para las 13 horas del domingo está previsto servir un almuerzo de confraternidad mariana, en el salón Gozo y Esperanza sito cerca de la flamante parroquia. El cordial ágape consistente en asado a la criolla, es organizado por la Peña Los Peregrinos y obtendrá muy lucido y animado desarrollo.
El flamante titular de la Capilla Nuestra Señora de la Medalla Milagrosa, ofició en la misma la primera misa el 23 de octubre de 1976, en tanto que el 15 de noviembre del mismo año, en nombre del obispado marplatense, tomaba posesión oficial de ese sagrado recinto Mons. Rómulo García. Simultáneamente, contando siempre con el fervoroso apoyo de su comunidad y la importante colaboración de un n
úcleo de amigos, residentes tanto en Necochea como en la Capital Federal, el Pbro. Jesús José Domaica se fue abocando a la tarea de concretar la construcción de un templo acorde con la importancia que requería la populosa barriada portuaria. Así fue como su construcción se inició en marzo de 1980, en la intersección de las calles 61 y 24, según proyecto y dirección técnica del maestro mayor de obras Manuel Teruel. Al cumplirse los primeros doce meses de haber sido colocada la piedra fundamental de la capilla, es decir el 27 de noviembre de 1980, se pudo inaugurar parcialmente la torre y dos campanas de bronce, confiándose en que un año más tarde se procedería a la inauguración del edificio. Lamentablemente, la crisis económica que atraviesa la Argentina ha impedido que esta obra —como tantas otras sobre las cuales se habían elaborado promisorias esperanzas— se concretara, y hoy puede verse el esqueleto del ambicioso proyecto, que permite formarse idea del atrayente y moderno aspecto exterior que presentará ese sagrado recinto. Mientras tanto, superada ya la etapa inicial de la capilla, cuando los actos de culto se desarrollaban en un modesto galponcito, merced a una generosa contribución pecuniaria que recibiera personalmente el Pbro. Domaica, y que éste desvió hacia lo que constituía y constituye su sueño más preciado, se construyó el edificio de la Biblioteca Teológica San Oscar, contiguo al del templo, donde actualmente se desarrollan en un marco digno y adecuado las ceremonias y actos propios de la liturgia cristiana.
úcleo de amigos, residentes tanto en Necochea como en la Capital Federal, el Pbro. Jesús José Domaica se fue abocando a la tarea de concretar la construcción de un templo acorde con la importancia que requería la populosa barriada portuaria. Así fue como su construcción se inició en marzo de 1980, en la intersección de las calles 61 y 24, según proyecto y dirección técnica del maestro mayor de obras Manuel Teruel. Al cumplirse los primeros doce meses de haber sido colocada la piedra fundamental de la capilla, es decir el 27 de noviembre de 1980, se pudo inaugurar parcialmente la torre y dos campanas de bronce, confiándose en que un año más tarde se procedería a la inauguración del edificio. Lamentablemente, la crisis económica que atraviesa la Argentina ha impedido que esta obra —como tantas otras sobre las cuales se habían elaborado promisorias esperanzas— se concretara, y hoy puede verse el esqueleto del ambicioso proyecto, que permite formarse idea del atrayente y moderno aspecto exterior que presentará ese sagrado recinto. Mientras tanto, superada ya la etapa inicial de la capilla, cuando los actos de culto se desarrollaban en un modesto galponcito, merced a una generosa contribución pecuniaria que recibiera personalmente el Pbro. Domaica, y que éste desvió hacia lo que constituía y constituye su sueño más preciado, se construyó el edificio de la Biblioteca Teológica San Oscar, contiguo al del templo, donde actualmente se desarrollan en un marco digno y adecuado las ceremonias y actos propios de la liturgia cristiana.
